En la búsqueda de la conciencia de uno mismo cuando una persona pasa de un umbral determinado un nuevo amanecer de la realización aparece en el horizonte. Ello aporta una nueva perspectiva en la vida. Se aporta un nuevo nivel de entendimiento agregado. Esta transformación del yo lleva a una persona para que sea capaz de interactuar con la existencia de un mayor nivel. No sólo en la existencia social sino además con la gran existencia mágica del universo.
Siddhi es una palabra oriental que significa poder sobrenatural. El término es a menudo mal entendido cuando se aísla y no se considera en la definición completa de ser el resultado de un mayor potencial humano. En esencia siddhis es el resultado de la expansión de la conciencia de sí mismo. Tenga en cuenta que de esta manera que en la vida todas las posibilidades están presentes pero no todas están actualizadas.
El Ser Superior a menudo se descubre de una forma u otra cuando experimenta estos Siddhis, los dos están vinculados entre sí. Este es un elemento familiar para la mayoría de nosotros. Es la parte de nosotros que hace que se tome las decisiones morales. Nuestro ego es la parte que marca la inmoralidad. La transcensión de la realidad material consiste en dejar de lado el ego finito de experimentar el espíritu infinito. Se pueden trazar paralelos aquí entre un marco freudiano y un marco esotérico espiritual, liberando nuestras facultades imaginativas y auto actualizándonos, ello implica dejar de lado la parte infantil de nosotros mismos que percibe mal estos aspectos de la existencia como actividades infantiles.
Una vez que nos liberamos de esta ilusión de la mente no hay nada que nos impida trascender estos límites para experimentar los beneficios reales y gratificantes como las conexiones empáticas, proyecciones astrales y las experiencias místicas.
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